Los geoparques españoles parecen haber salido del imaginario de Tolkien. Engloban paisajes que, más allá de atrapar al visitante con su magnetismo, trascienden con la historia de sus suelos, formaciones rocosas y paisajes marinos, capaces de contar millones de años de historia. Atesoran entornos como Montserrat y El Hierro, donde uno se pregunta: ¿cómo ha llegado esto a ser así? y entonces, la geología tiene la respuesta. A inicios del XXI, la Red de Geoparques de España surgió para dar valor a territorios geológiamente únicos bajo el paraguas de la Red Europea de Geoparques. Ya a partir de 2006, se empezó a crear esta constelación de geoparques, donde los territorios son valorados por su patrimonio geológico y por su estrategia de desarrollo territorial sostenible. Estos son aquellos que están catalogados por la UNESCO como Geoparque Global.