En el #2: Estocolmo (Suecia)
Aunque no es la ciudad con más ciclistas urbanos del país, sí que es la más preparada para proporcionar este servicio a sus habitantes. En concreto, 913 km de carriles bici atraviesan la ciudad, en muchos casos, separados del tráfico de vehículos a motor. En una ciudad en la que los coches tienen que pagar para entrar, este medio de transporte ecológico ha ganado mucho peso.
En la capital existe un servicio de bicicletas público que puede usarse entre abril y octubre, y los parkings son infraestructuras habituales a lo largo de la ciudad. Aprovechando que el verano de Suecia no suele superar los 25 grados, turistas y habitantes pueden disfrutar del aire libre circulando por vías que, además, son respetuosas con los peatones, ya que su diseño, con barreras naturales o arquitectónicas, ponen una separación clara entre ambos espacios.