Al mismo ritmo que las temperaturas bajan, aumenta nuestro el afán por sol y calorcito. Por eso, tras haber propuesto en esta sección varias espadas por Europa para contemplar las auroras boreales y el ambiente navideño de algunas ciudades europeas, proponemos ahora destinos en los que reina el calor o, al menos, las temperaturas agradables. Son viajes de unos cinco días a una semana, con o sin playa, pero todos ellos emocionantes.