
Las ciudades universitarias de Cambridge, Oxford, Salamanca, Coimbra, Bolonia o Lovaina se caracterizan por su animado ambiente, con sus calles llenas de estudiantes, bares de moda y extensos parques. Todas ellas atesoran una tradición universitaria que se remonta a siglos atrás y aunque las instalaciones de estas prestigiosas instituciones académicas se han ido renovando, todas ellas conservan con mimo los edificios originales, muchos de ellos considerados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Merece la pena penetrar en estos templos del saber y sentir el peso de la historia de sus salas y claustros en los que han estudiado los más grandes eruditos.