Pero, ¿cómo? ¿es posible? ¿Se puede concebir Almería como un ente aislado de su litoral capitaneado por las evocadoras playas de Cabo de Gata? Es difícil, sí. Pero no imposible. Dicen los autóctonos que la provincia almeriense alberga todos los paisajes que uno puede imaginarse: urbano, playa, montaña, bosque y desierto. Y razón no les falta.