Bosques y praderías marcan el límite con el azul del mar imponiendo su color. Este verde ha concedido el título de Costa Verde al tramo que va desde la ría de Tinamayor a la del Eo. La costa asturiana ostenta, además, otros tres títulos no menos importantes: su litoral de 400 km es el mayor de todo el Cantábrico, es también el menos degradado con algunos tramos prácticamente inalterados y, finalmente, hay que destacar sus villas marineras. En todo el norte peninsular no he encontrado pueblos de pescadores con una arquitectura y un ambiente tan auténtico y bien conservado: Llastres, Tazones, Cudillero, Viavélez o Tapia de Casariego son algunos ejemplos donde todavía se puede respirar el aroma marinero.