Cualquiera que decida visitar la bella ciudad de Nuremberg se encontrará con una postal medieval en todos sus rincones, pero lo cierto es que gran parte de lo que se ve es una reconstrucción. Más de un 90% de su territorio fue destruido por los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial por ser la base de operaciones del führer, pero la ciudad consiguió reconstruirse, utilizando en la medida de lo posible las piedras y materiales de las casas y los muros de antaño, lo que ha permitido un mayor aire de autenticidad.
De católica a protestante en pocos años, pero conservando sus figuras marianas, uno de los principales centros del Renacimiento alemán y un gran motor económico de Alemania, es también una de las ciudades de Europa con más encanto para vivir la Navidad. Candidata para ser Capital Europea de la Cultura 2025 por su gran cantidad de museos y atractivos culturales, con una gastronomía variada y sabrosa, su casco antiguo o Altstadt, cercado por una muralla de más de 5 km, encierra algunas de las más bellas estampas de una de las ciudades más bellas de Baviera.