Cuando se viaja por Europa, el trayecto está lleno de monumentos icónicos que se reconocen por su renombre y por haberlos visto una y otra vez en películas, libros y todo tipo de publicaciones. Tanto, que una sola imagen se ha convertido en la seña de identidad del lugar en el que se encuentra y permite identificarlo sin necesidad de hacer grandes esfuerzos. Desde los más antiguos hasta los más modernos, estos son algunos de los rincones más populares del continente europeo.