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Estas son las únicas cuevas Patrimonio de la Humanidad de Europa

Estas enormes cavidades naturales que preservan tesoros históricos y geológicos han sido reconocidas por la UNESCO como lugares únicos que deben ser protegidos.

El extenso territorio europeo que abarca desde los montes Urales hasta el confín sur de la Península ibérica fue ocupado desde la prehistoria por los homo sapiens y sus predecesores. Prueba de ello son los numerosos yacimientos que se encuentran diseminados por Europa y que, además de las evidencias de la presencia humana, son también testimonios de largos procesos geológicos que permiten explicar parte de la historia geológica de la tierra.

El gran valor cultural y natural de estas cuevas y grutas ha sido reconocido por la UNESCO incluyendo siete sitios arqueológicos ubicados en Europa en la lista del Patrimonio mundial de la Humanidad, protegiendo así la enorme significación histórica que tiene cada uno de ellos.

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altamira - shutter

Foto: Shutterstock

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Cueva de Altamira y arte rupestre del norte de España

Los techos de la cueva de Altamira, así como los de el resto de las 17 cavidades que fueron inscritas conjuntamente como Patrimonio de la Humanidad, son uno de los más bellos ejemplos del apogeo del arte paleolítico que se desarrolló en Europa entre el 35.000 a.C. y el 11.000 a.C. Las condiciones ambientales estables que proporciona el interior de una cueva profunda son las responsables de haber mantenido casi intactas las pinturas durante miles de años. En sus techos se conservan conjuntos de pinturas de bisontes, ciervos, caballos y otras figuras antropomorfas, así como manos fijadas en la pared en negativo y máscaras que fueron dibujadas aprovechando las protuberancias de la roca. En definitiva, huellas que atestiguan un total dominio de la técnica artística, tanto de materiales y colores como la perspectiva y el soporte.

aggtelek - istock

Foto: Istock

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Cuevas cársticas de Aggtelek y Slovak - Hungría y Eslovaquia

Cuando fueron inscritas como Patrimonio de la Humanidad en 1995 se conocían 712 cuevas, actualmente ya son más de 1000. Este área relativamente pequeña situada al noreste de la frontera de Hungría y al sureste de la eslovaca ocupa un territorio protegido de 56 hectáreas en el que los procesos geológicos de formación cárstica han dado lugar a la creación de una increíble diversidad de estructuras donde formas, perfiles, colores, recovecos y pasadizos crean un festival para los ojos que los contemplan y los pies que los caminan. En estas rocas se puede leer la historia geológica de la tierra durante decenas de millones de años: un tesoro de valor incalculable para cualquier estudio geológico.

Chauvet Cave - CC

Foto: CC

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Cueva Chauvet-Pont d'Arc - Francia

Contemplar las maravillosas pinturas de las paredes de la réplica de la cueva Chauvet-Pont d’Arc -replicadas para no dañar las originales con visitas masivas a la gruta real- es como sumergirse en un museo de biología animal prehistórica de especies extinguidas. Frente a los ojos del visitante se despliegan dibujos datados alrededor del 30.000 a.C. realizados con un dominio de la técnica nunca antes visto que representan osos de las cavernas, panteras, mamuts, rinocerontes lanudos o leones. Estas más de mil imágenes figurativas descubiertas en 1994 constituyen un testimonio excepcional del arte prehistórico por tratarse de las más antiguas que se han datado nunca, no son pues la culminación del arte prehistórico sino el inicio del mismo. Y a su alrededor, el valle del río Ardèche, cuyo recorrido ha erosionado un impresionante cañón de vertiginosos acantilados.

skocjan - istock

Foto: Istock

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Cuevas de Škocjan - Eslovenia

Pocos lugares en el mundo ofrecen mejores posibilidades que las cuevas eslovena de Skocjan para analizar los fenómenos cársticos. A medida que el visitante penetra en las enormes cavidades que quedaron hundidas bajo tierra tiempo atrás y que el río Reka se encargó de seguir excavando, la temperatura desciende y el espectáculo visual aumenta. Se trata de uno de los cañones de río bajo tierra más grandes del planeta, pues en algunos tramos la profundidad puede llegar a alcanzar algo más de 200 metros. En horizontal, el camino recorre casi 6 kilómetros en los la vista se deleita con cascadas subterráneas y enormes estalactitas, testimonios del paso de los milenios.

gorham Caves From The Sea

Foto: Visit Gibraltar

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Complejo de la cueva de Gorham - Reino Unido

A pesar de que las excavaciones todavía siguen en proceso, la cueva de Gorham ya ha aportado evidencias que han contribuido a esclarecer la presencia y las costumbres de los neandertales que ocuparon este lugar 100.000 años atrás. En la ladera este del Peñón de Gibraltar se abren cuatro cuevas que, tras ser descubiertas a principios del siglo XX por el capitán Gorham (de ahí su nombre), se han convertido en un importante lugar de estudios arqueológicos por los hallazgos de pinturas rupestres y evidencias de producción de herramientas y otros objetos.  El conjunto de las cuevas de Gorham fue incluido en la lista del Patrimonio de la Humanidad en 2016.

Lascaux - istock

Foto: Istock

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Sitios prehistóricos y cuevas decoradas del valle del Vézère - Francia

El impresionante conjunto de yacimientos y cuevas que alberga el valle del Vézère es uno de los mayores tesoros de la bella comarca francesa del Périgord. Estas tierras habitadas por el hombre desde hace al menos 100.000 años esconden entre sus pequeños pueblos 147 yacimientos paleolíticos y 25 cuevas en las que se puede contemplar algunas de las pinturas rupestres más importantes de este periodo prehistórico. Declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1979, dos de sus paradas imprescindibles son la cueva de Lascaux -descubierta accidentalmente por unos chicos que buscaban a su perro en 1940- y el pueblo de Eyzies de Taillac, cuyo Centro Internacional de Prehistoria ofrece una visión general del periodo.

swabian jura - shutter

Foto: Shutterstock

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Cuevas y arte de la Edad de Hielo en la sierra Jura de Suabia - Alemania

Los primeros homo sapiens llegaron a Europa hace entre 40.000 y 50.000 años y escogieron, entre otros, este rincón del sur de la actual Alemania para instalarse. Al sur de Stutgart, cerca de la frontera suiza, entre los verdes y fértiles valles de los ríos Lone y Ach se descubrieron seis cuevas en la década de 1860. Las grutas de la sierra de Jura de Suabia desvelaron en su interior diversas figurillas con forma humana, animal y criaturas fantásticas que mezclan formas de distintas especies, así como otros instrumentos musicales y objetos. Todo ello conforma un conjunto cultural que ha contribuido a determinar los orígenes del desarrollo humano del arte.