Declarada Monumento Histórico-Artístico, la Catedral de Mallorca es el patrimonio artístico más emblemático de las Islas Baleares, a las que, por otro lado, no les faltan monumentos naturales de los que disfrutar. “La Seu”, como se la conoce popularmente, es uno de los templos góticos más admirados en el mundo y, sin duda, es una visita imprescindible en cualquier viaje a Mallorca.
"No creo que se pueda admirar un templo que con mayor simplicidad de medios llegue a más alta belleza" (Santiago Rusiñol)
La Catedral de Mallorca ha tenido numerosos admiradores. Entre ellos, el pintor Santiago Rusiñol, que viajó a menudo a Mallorca, de la que se declaraba un auténtico enamorado. Acabó conociendo bien la isla, a la que, en 1912, le dedicó el libro La isla de la calma. En él hay un capítulo dedicado a la Catedral de Mallorca. De ella dijo que no había ningún otro templo que con mayor simplicidad de medios hubiera alcanzado tanta belleza. El artista recomendaba entrar para admirarla en todo su esplendor: “¡Por fuera verás la armadura, pero entra y verás el alma!”. Así que, no nos quedemos fuera, entremos.