Desde la desembocadura del Río Foix hasta el Delta del Ebro, la Costa Daurada es mucho más que playas, ¡pero qué playas tiene! No se puede pasar por alto el potencial playero de la provincia de Tarragona. Son cerca de 90 kilómetros donde hay para escoger: extensas playas, urbanas, remotas, con arena, con piedras, naturistas, salvajes, con castillos, con chiringuitos, familiares, entre acantilados, con vegetación, para practicar deportes o para estar tumbado, dejando que las olas acunen el paso del tiempo.
Al sur de Cataluña, en todas las playas de Tarragona se disfruta de un mar calmo, sin excesivo oleaje. Son escenarios que esconden historias singulares y de conservación de ciertas áreas naturales. En muchas de ellas, ondea con orgullo en el horizonte la Bandera Azul por la calidad de sus aguas. Además, el impresionante conjunto de patrimonio cultural e histórico, la gastronomía, parques de atracciones y las infraestructuras deportivas proporcionan una infinidad de planes aftersun como complemento a unas vacaciones familiares o en pareja ideales.