El nuevo Parque Arqueológico del Coliseo es el más grande del mundo

Los edificios más emblemáticos de la Antigua Roma forman parte de un nuevo conjunto arqueológico que tiene como objetivo preservar los símbolos de Italia

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Foto: Jorge Valenzuela A.

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Vistas del Parque Arqueológico del Coliseo

El nuevo Parque Arqueológico del Coliseo comprende monumentos como el propio Coliseo, el recinto del Foro romano, el Palatino, el Domus Aurea, el parque Colle Opio  y el Circo Máximo. 

Foto: Diliff

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Coliseo

Las obras realizadas en 2016 en el Coliseo incluían el lavado de las piedras de la fachada, donde se encontraron bajorrelieves y grabados desconocidos, así como el relleno de grietas. Entre las mejoras del Plan estratégico para el arreglo y desarrollo del área arqueológica central de Roma (AACR) se barajó la idea de volver a cubrir el suelo del Coliseo con arena, lo que ha causado cierta polémica.  

Foto: Bert Kaufmann

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Foro romano

El Foro fue durante la época del Imperio romano el corazón de la ciudad. En él aún se conservan los vestigios de algunos de los edificios más emblemáticos de la Antigua Roma. Entre ellos el templo de Rómulo, varias columnas del templo de Cástor y Pólux y del de Saturno, los restos de la basílica Emilia y el arco de Setimio Severo. 

Foto: Xosema

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Palatino

Esta colina es la más céntrica de las siete que se encuentran en la ciudad de Roma. Desde este mismo monte fue donde Rómulo decidió levantar la ciudad. 

Foto: PsyCat

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Circo Máximo

Este antiguo estadio fue utilizado durante la Antigua Roma para celebrar carreras de carros. Está situado entre los montes Aventino y Palatino, y fue el más grande de su tiempo. 

Foto: Gtres

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Domus Aurea

Este imponente palacio fue construido bajo el mandato del emperador Nerón. En el año 104 sufrió un gran incendio, su conservación se debe a que en la época de Trajano fue cubierto con escombros. Sus murales y frescos fueron objeto de estudio durante años. 

Pasear por Roma es como introducirse en una máquina del tiempo que nos lleva hasta el que fue el imperio más potente del mundo: el romano. Su antigua capital se entremezcla entre una Roma moderna donde las nuevas edificaciones, plazas y jardines han tenido siempre que conformarse con ocupar un segundo plano. El gran protagonismo se lo lleva su cara más antigua, donde los vestigios de un próspero pasado son la imagen no solo de la ciudad, sino del país entero.

El Coliseo, conocido también como el anfiteatro Flavia, es el monumento más turístico de la ciudad. Solo en el 2016 lo visitaron más de 6,5 millones de personas. Visitantes que también pasearían por las ruinosas calles del antiguo Foro, donde durante su época de máximo esplendor era el centro comercial y administrativo de la urbe. Sobre él se levanta el Palatino, la más céntrica de las siete colinas de Roma. Aquí es donde Rómulo comenzó a construir la ciudad que, a lo largo de los años, se acabaría convirtiendo en uno de los referentes históricos y artísticos del mundo.

El nuevo parque arqueológico

Para preservar los monumentos que aún quedan en pie se ha creado el nuevo Parque Arqueológico del Coliseo, un nuevo proyecto que tiene como objetivo crear un espacio unitario comprendido por reliquias como el citado Coliseo, el Foro, los históricos edificios del Palatino, el antiguo palacio levantado por Nerón: el Domus Aurea, el parque Colle Oppio y el Circo Máximo, entre otros. En total, 78 hectáreas repletas de joyas históricas que convierten a este nuevo parque en el más grande e importante del mundo en su categoría.

Su idea inicial, incluida en el plan estratégico para el arreglo y desarrollo del área arqueológica central de Roma (AACR) propuesto por el ministro de Cultura, Dario Franceschini, era revitalizar el casco urbano convirtiendo lo que es su centro histórico en una ciudad histórica accesible para los ciudadanos. Entre las diferentes propuestas se encuentra la peatonalización de las calles, mejorar la accesibilidad para las personas de movilidad reducida y rescatar y restaurar algunas de las zonas degradadas.

Para su buen funcionamiento, una de las novedades es que se pondrá al frente a un director elegido por concurso internacional que será el encargado de gestionar los distintos puntos aprobados en el plan estratégico. Hasta el momento, algunos de estos vestigios como el Coliseo y el Foro romano estaban a cargo de la Superintendencia Especial de Roma. Con el nuevo parque, el recinto adquiere cierta autonomía, tal y como se ha ido haciendo con algunos de los museos del país y que ha permitido mejorar sus servicios y crecer en número de visitantes.

A pesar de la envergadura del proyecto, que convertirá el centro de Roma en un referente arqueológico, algunas de las propuestas no han tenido muy buena acogida. Una de ellas es la de devolver la antigua imagen al Coliseo cubriendo su suelo con arena. Los opositores consideran que esta iniciativa podría correr el riesgo de convertir el anfiteatro en un escenario de espectáculos, como habría ocurrido en Verona. De momento, la primera fase de las obras que se culminaron en el 2016 se centraron en limpiar su fachada - en la que se han encontrado elementos que hasta entonces se desconocían, como un bajorrelieve, frescos y filigranas - y en rellenar las grietas de su superficie. También se ha mejorado su sistema de cierre de los arcos. Los próximos trabajos estarán enfocados en sus interiores, los antiguos sótanos del edifico, así como de mejorar el servicio de los visitantes.