Viajar de Nairobi a la portuaria Mombasa casi equivale a cambiar de mundo: de las sabanas pobladas por elefantes y leones a la luminosa orilla del Índico. Al desenfado y el bullicio característicos de cualquier región africana, este litoral aporta multitud de alicientes naturales, desde reservas marinas hasta zonas de manglares y bosques de interior donde habitan elefantes. Las playas y las islas que emergen frente a la costa se han convertido en un destino de gran interés para quien busca relajarse y disfrutar de la biodiversidad de estas aguas de coral.