Asun Luján
Periodista redactora de Viajes National Geographic
Actualizado a
El cantón suizo de Friburgo se extiende por valles y lagos presididos por colinas prealpinas, con pueblos medievales y aldeas de montaña en su corazón. A medio centenar de kilómetros radiales desde Friburgo, la capital que da nombre al cantón, esta región de cultura bilingüe (francés y alemán) da cobijo a preciosos pueblos, que además son la puerta para actividades en la naturaleza, como caminatas y rutas en bicicleta por senderos que en invierno son de esquí de fondo. El broche a esta escapada es la gastronomía, donde sus famosos quesos con Appellation d'Origen Contrôllée (AOC) son protagonistas absolutos de tradicionales fondues.