Hay que remontarse al año 824 para dar con la fundación del pueblo más antiguo de España, concretamente al día 13 de octubre, cuando el Reino de Asturias concedió a Brañosera la primera carta puebla de la que se tiene constancia en España. También conocida como carta de población o fuero, con este documento los reyes, señores o eclesiásticos otorgaban privilegios a los vecinos para repoblar ciertas zonas de interés estratégico o económico durante la Reconquista.
En 2018, el Congreso de los Diputados reconoció ese acontecimiento, en el que el conde Munio Núñez y la condesa Argilo, que ejercían el gobierno y el poder sobre la zona de Brañosera, concedieron una serie de capacidades y organización a sus súbditos, rigiéndose por ciertas normas locales. Entre ellas, se encontraba el privilegio de poder explotar el monte en beneficio propio y pastar los animales o evitar algunas obligaciones militares. A pesar de que existen otras localidades de España habitadas desde antes, Brañosera (hoy parte de Castilla y León) se convirtió así en el primer lugar que tuvo entidad jurídica, equiparable a un ayuntamiento primitivo. Después llegarían las cartas puebla a Freixá, Cardona o Longares.
Hoy, este pequeño pueblo de 250 habitantes se prepara para celebrar el 1.200 aniversario del Fuero, que tendrá lugar el día 13 de octubre de 2024. Entre sus calles con casas de madera y piedra extraídas de los alrededores y las iglesias románicas de Santa Eulalia o de San Miguel, se celebrarán acontecimientos para conmemorar la carta puebla. Más allá del centro histórico, sus alrededores invitan a pasear por el parque natural de Fuente Cobre, donde nace el río Pisuerga.