Asun Luján
Periodista redactora de Viajes National Geographic
Actualizado a
Gales es fruto de un clima lluvioso, de una orografía juguetona y de un pasado forjado en mil batallas. Por eso no es de extrañar que, a lo largo de su costa y de su interior, todavía sobresalgan localidades de piedra y almena cuyos baluartes y callejuelas empedradas son hoy un reclamo. Y estas son las más bellas.