El llamado «síndrome de Stendhal» -llamado así por el famoso escritor que lo describió ya en 1817- sigue embargando al visitante que llega a la ciudad del Renacimiento y pretende ver en unos pocos días el impresionante alud de arte que se concentra. Es parte de los peligros que tiene tanta belleza, tanto contemplar y disfrutar en una rápida escapada a Florencia.
Lo adecuado es tomar la ciudad a pequeños sorbos, en varias escapadas para no sufrir una «indigestión» florentina. Hay que ir con tiempo para sentarse en las plazoletas, degustar platillos de la excelente cocina toscana, pasear sin rumbo por las calles empedradas flanqueadas por edificios medievales y renacentistas de paredes desconchadas y gran encanto... Por eso, porque es excesiva, hemos elaborado una lista las atracciones indispensables de Florencia.
Más información para viajar a Florencia
Cómo llegar y moverse: el aeropuerto Amerigo Vespucci, a unos 8 km, recibe vuelos directos de Madrid y Barcelona. La línea de autobús «Vola in bus» conduce al centro de Florencia en unos 30 minutos. El autobús City Sightseeing y las bicicletas de alquiler (hay 70 km de carril bici) son una buena forma de tomar contacto con la ciudad. La Firenze Card incluye la entrada a 50 museos y villas, así como el uso ilimitado del transporte público.