En el #3: Pasear el centro
Lo magnífico del centro sevillano no son solo los siglos de historia que acumula, sus infinitas leyendas o los monumentos emblemáticos que acoge. Recorrerlo da la posibilidad de admirar todos los estilos del arte presentes en la capital andaluza, desde el medieval al contemporáneo. Además, el encanto de las calles, plazas y rincones y el tamaño asequible de la ciudad la hacen ideal para conocerla callejeando a pie o con rutas en bicicleta, sin olvidar los clásicos paseos en calesa desde la Catedral al Parque de María Luisa.
Lo mejor será empezar recorriendo las orillas del Guadalquivir. La Torre del Oro es sin duda el monumento más emblemático erigido junto al río sevillano, además de un constante punto de referencia. Esta atalaya defensiva originaria de la época almohada (siglo XIII), con almenas y doce costados, fue una de las defensas fluviales de la ciudad. Hoy aloja el Museo Naval y es además punto de partida de los paseos por el Guadalquivir, que pueden ser desde rutas cortas a excursiones hasta su desembocadura en Sanlúcar de Barrameda.
La Plaza Nueva de Sevilla la preside el Ayuntamiento, un edificio histórico del siglo XVI que está considerado uno de los ejemplos más notables de la arquitectura renacentista de nuestro país, cuya belleza se amplía con elementos decorativos del plateresco. La casa consistorial se ubica donde se encontraba el Corral de los Olmos, un grupo de casas mudéjares que no estaban en muy buen estado, y que el rey Carlos V hizo sustituir por un solemne edificio para la ciudad. Hoy se puede visitar el interior, donde se guardan techos de artesonados y muchas obras de arte.
El Archivo General de Indias se erige compartiendo espacio con la Catedral en la Plaza del Triunfo. Este edificio herreriano es uno de los más majestuosos de Sevilla y ejemplo del estilo que promovió el arquitecto Juan Herrera. Se construyó entre 1584 y 1598 para acoger la Lonja de Mercaderes. Años después, en 1785, el rey Carlos III lo convirtió en el Archivo de Indias donde mandó reunir toda la documentación de la administración del Nuevo Mundo. Conserva unos 43 000 legajos, con 80 millones de páginas y 8000 mapas y dibujos. Dicen que si se colocase en fila todo el material que se conserva, este ocuparía nada menos que ¡9 kilómetros!
Este paseo de arte puede seguir hacia el oeste de la Catedral y el Ayuntamiento, cruzando el gastrobarrio El Arenal, el top sevillano para disfrutar de la nueva gastronomía, para llegar a la Plaza de la Encarnación. En ella se levanta la vanguardista estructura del Metropol Parasol, el famoso mirador de cinco niveles conocido como Las Setas –y una de las estructuras de madera más grande del mundo–, que encarna la Sevilla del siglo XXI.