Navegar por canales y ríos es un plan perfecto para pasar desde un fin de semana hasta quince días, visitando ciudades monumentales, poblaciones rodeadas de bosques o fortalezas medievales encaramadas a peñascos afilados. Las rutas fluviales pueden realizarse en primavera, verano y otoño. Las opciones también son muy variadas, desde seguir el curso remando en canoa hasta alquilar de un barco con camarotes o bien viajar a bordo de un crucero con todas las comodidades.