
Desde el piso 72 de la Torre Shard, el edificio más alto de Europa occidental con 310 metros, Londres se aparece como un gran lienzo en relieve, en el que los hitos de la capital británica –la catedral de San Pablo, Westminster y la Torre de Londres– se muestran en miniatura. Situado en Southwark, en la orilla sur del Támesis, junto al Tower Brigde, el mirador fue inaugurado el pasado día 1 de febrero y ya se ha convertido en una de las principales atracciones turísticas de la ciudad.
Subir en 60 segundos
Merece la pena disfrutar de esta nueva y vertiginosa experiencia que permite, no solo contemplar una maravillosa panorámica, sino también experimentar el ascenso a toda velocidad, sesenta segundos de recorrido, hasta la planta 68 de la torre. Desde este piso hacia la cúspide, en el piso 72, comienza el circuito por cinco plantas absolutamente acristaladas que reciben el nombre The View from the Shard. Toda la visita está amenizada con música de la Orquesta Sinfónica de Londres y para la decoración, en clave de humor, se ha recurrido a grandes mitos ingleses como Alfred Hitchcok y George Orwell. Es aconsejable utilizar los baños de la planta 68, pues están abiertos a la ciudad a través de enormes ventanales, así como contemplar la panorámica por los telescopios digitales instalados en la planta 69 y, por supuesto, dejar vagar la mirada sobre Londres desde la plataforma del piso 72.
Guerra de altura
La Shard, del arquitecto italiano Renzo Piano, tiene forma de triángulo irregular desde la base hasta la parte superior y está totalmente revestida de vidrio. La estructura fue completada en abril de 2012, y abrió las puertas al público el 5 de julio del mismo año. Hasta noviembre de 2012 fue el edificio más alto de Europa, fecha en la que se inauguró la Torre Ciudad Mercurio de Moscú, que mide 339 metros.
El mirador de la Torre Shard está abierto todos los días desde las nueve de la mañana hasta las diez de la noche.
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Turismo de Londres