Ahora que llegar a Ancona nos lo han puesto al alcance de nuestra mano con vuelo directo desde la península, la zona de los pueblos medievales de Le Marche (Las Marcas) se antoja un viaje imprescindible. No solo por la belleza de sus cascos históricos, que desde luego merecen un recorrido pausado por cada una de sus calles vestidas de balcones florales, si no también por el interés que despiertan sus productos y recetas locales, así como sus templos gastronómicos. Un viaje para recorrer Le Marche literalmente y a golpe de cuchillo y tenedor.