Gastropueblos

Los mejores restaurantes de El Vendrell, el inesperado pueblo gastronómico de Tarragona

Desde su casco antiguo hasta su costa, esta localidad sorprende con pastelerías, restaurantes y experiencias que merecen una visita.

La capital de la comarca del Baix Penedès, ubicada en un importante nudo de comunicaciones y conocida por ser la cuna del compositor y violonchelista Pau Casals, además de residencia de artistas como Apel·les Fenosa o Àngel Guimerà, es también el lugar perfecto para degustar los mejores productos de la comarca. Caldos de la DO Penedès y la DO Cava, manjares como el gallo del Penedès, el xató o la coca enramada, además de la festividad del Pa beneït, son parte de la cultura gastronómica de El Vendrell, una localidad tarraconense que, además, ofrece muchos lugares donde deleitarse con sus sabores.

 

Para leer más

  1. Restaurantes y mucho sabor: los pueblos de Tarragona donde mejor se come

  2. El paraíso de playas que esconde el sur de Tarragona

  3. Los pueblos más bonitos de Tarragona

  4. El Cup Vell, el restaurante ‘speakeasy’ de Tarragona que es todo un hallazgo

  5. Las veinte mejores playas de Cataluña para remojarse este verano

  6. Diez bodegas clave para disfrutar del Priorat

SABOREANDO LA COSTA

La pequeña localidad de Comarruga, perteneciente a El Vendrell, es la cara marítima del pueblo. Situada entre el nudo de comunicaciones de la estación de tren de Sant Vicenç de Calders y el suave oleaje del Mediterráneo, no faltan en su pequeña extensión joyas como el hospital reconvertido en el hotel de lujo Le Méridien Ra Beach Hotel & Spa o la casa de verano de Pau Casals, Vil·la Casals, donde ahora se erige un museo dedicado a su carrera musical.

Vil·la Casals
Vil·la Casals

Las tres antiguas casas de invitados, anexas al edificio, ubican ahora el restaurante cuyo nombre rinde homenaje a la antigua vivienda. La terraza frente al mar sigue como antaño, salvo que ahora un puñado de mesas se reparten entre el espacio y el comedor. Los cinco sentidos se entregan al mar, visible hacia el horizonte, pero también en el plato, donde las gulas al ajillo, los caracoles de mar con alioli o las croquetas de rape y gambas son la antesala perfecta para preparaciones como la sinfonía de canelones de mar gratinados.

A cinco minutos a pie por el Paseo Marítimo de San Salvador se encuentra uno de los restaurantes más famosos de Comarruga: El Casinet. El local, un edificio histórico construido a finales del siglo XVIII, funcionó como almacén, casino y discoteca, y cuenta con un Solete en la Guía Repsol. Sergi Escolà, el chef al mando, consiguió llevar a cabo en 2018 uno de sus mayores proyectos: Mimcook, un paellero de precisión puntera que le ayudase a conseguir la misma calidad en todas sus paellas.

El Casinet
El Casinet

Las más de 300 raciones diarias de arroz que sirve el equipo de Escolà no solo reafirman lo necesario de su ambicioso reto, sino la calidad y la fama de la que gozan entre los comensales. El espacio también hace su parte: es difícil elegir entre sus mesas frente al mar, el amplio comedor, el íntimo altillo y el gran patio, mágicamente iluminado por las noches.

Más allá de sus ensaladas y fríos, los platos tradicionales se suceden en carta junto a guiños asiáticos y un final clásico, un carrito de deliciosos postres caseros.

Volviendo al Paseo Marítimo vienen al encuentro los olores de La Cuina de la Marga, abierto hace más de dos décadas por Margarita y ahora bajo la batuta de su hijo, Àlex Hellín. Guiado por su devoción por la cocina marinera, el chef decidió potenciar la paella, el pescado y el marisco con platos como la ventresca de atún con aceitunas de Kalamata o los moluscos y navajas del Delta, de donde proceden también sus arroces.

El Casinet
El Casinet (El Vendrell)

Más allá de las propuestas clásicas de arroz del señorito o paella marinera, Hellín ofrece recetas más personales, como el arroz de bacalao y butifarra negra, el de setas y foie o el romesquet, con sepia y almejas. Además de buena mano en la cocina, el chef también tiene maña con la carpintería, algo que se puede apreciar en el restaurante, donde mesas, sillas y bancos están hechos en su propio taller, al igual que los cuadros y la decoración marinera que ambienta el local.

Y por último y no menos importante, La Calma Salada, que se ubica en el pequeño puerto, bien entrada en el mar, es la panorámica perfecta para una cocina de mar hecha con cariño. En este restaurante peinado por la brisa, Dídac Santos, de familia de pescadores, pone en valor en su carta el pescado de costa, como el besugo o el gallo de San Pedro y, como no podía ser menos, el arroz y la fideuá.

La Calma Salada
La Calma Salada

Sin embargo, no hay que dejar de lado sus deliciosos entrantes - muchos de ellos con un fresco toque de lima -, como el carpaccio de gamba roja o la fritura malagueña, rebozada con harina de garbanzo. Además de tener toda su carta hecha a prueba de intolerantes al gluten - menos la fideuá - La Calma Salada organiza cada año el evento We Love Tanzania, donde un porcentaje de lo recaudado ese día se destina a la ONG La Mirada de Maraboo.

BRUNCH, COMIDA Y CENA

Monet’s Brunch es una cafetería desenfadada que abrió en plena pandemia para ofrecer algo diferente a El Vendrell, un servicio de brunch al más puro estilo americano en un local decorado con carteles de series y películas, un rincón de lectura y platos con nombres hollywoodienses. Gofres, pancakes y chocolate se hacen cada día a mano, en una carta que incluye desde smoothies hasta tés, además de zumos y cafés, sin olvidar los helados, las brochetas y una amplia variedad de bagels, croissants y sándwiches con un gran surtido de opciones para mañanas y tardes de relax.

Una gran opción para comer en el centro del pueblo es L’Enxaneta, un gastrobar que desde 2017 regenta la pareja de César Portillo y Daniela Belvisi, dueños también de L’Alquimista. Sus procedencias, ecuatoriana e italiana respectivamente, se han fundido de lleno en su cocina, en la que tampoco falta el toque mediterráneo y un guiño a su pasión por la cocina japonesa. Además de su punto diferenciador y la inclusión de opciones veganas y para celíacos en el menú, el restaurante es todo un éxito por la gran calidad de su producto, procedente de negocios locales y de cercanía, como el Celler Avgvstvs o los productores de aceite Torclum.

Fregula con marisco
iStock

El coqueto restaurante de La Locanda dei Sapori es, sin duda, el lugar perfecto para transportarse a una trattoria italiana nada más cruzar la puerta. No es el país vecino, pero Davide Adorno se encarga de que lo parezca en un local donde la música, la decoración y la iluminación crean un microclima que la carta redondea. La cesta del chef se llena con carnes y pescados del mercado local, pero también con productos que trae de Italia, como la burrata, el tomate, la harina o las conservas. Difícil decidir entre su amplia oferta de carnes, pescados, pizzas y risottos, pero su especialidad es la pasta con marisco, y su postre más curioso, el fuet de chocolate.

EXPERIENCIAS VINÍCOLAS

La transitada N-340 tiene una parada obligatoria, el Km 1187. En este punto de la carretera que recorre el Mediterráneo se encuentra el espacio de degustación homónimo, ubicado dentro de la tienda Jané Winestore, una nave de 700 m2 donde se ofrecen miles de referencias de cervezas, licores, destilados, cavas, refrescos y, por supuesto, vinos. Algunos de estos productos, además, son de producción propia, como el licor de arroz El Petonet, reconocido como Mejor Licor de Innovación de 2018 por la Feria Alimentaria.

Celler Augustus Forum
Celler Augustus Forum

Dentro de la tienda, donde también se venden productos delicatessen de alimentación, como quesos, jamón, embutidos, conservas y dulces, se encuentra el Km 1187, un espacio de degustación donde probar muchos de los alimentos y bebidas de los lineales. Tapas, aperitivos, bocadillos, desayunos, comidas y cenas se sirven en una nave de diseño donde encontrar lo mejor del territorio.

En otra carretera, esta vez en la que conecta El Vendrell con otro de sus núcleos de población, Sant Vicenç de Calders, asoma el Celler Avgvstvs Forvm, una bodega que elabora vinos y vinagres y que exporta sus productos a más de 40 países de todo el mundo. Las variedades de charelo, malvasía de Sitges, macabeo, garnacha o tempranillo se mezclan con el cabernet, el merlot o el chardonnay en un cultivo sostenible desde la tierra hasta la botella.

Celler Augustus Forum
Celler Augustus Forum

Vinos tintos, blancos y rosados acompañan a vinagres y aceites de oliva virgen extra no solo en la bodega, sino también en el Degvsta Restaurant, donde el chef Jordi Guillem cocina recetas modernas que imitan los métodos de conservación y cocción utilizados hace más de 2.000 años por los romanos, y que se sirven frente a dos mares: el de viñas y el Mediterráneo. Pero la oferta gastronómica y enoturística no acaba aquí, pues también se puede disfrutar de visitas teatralizadas, descubrir las barracas de piedra seca y hacer diferentes catas.

BOCADOS DULCES Y SELECTOS

No existe un vendrellense que no conozca este local del centro del pueblo, punto de encuentro y lugar de visita obligada para quienes se acerquen a la localidad. L’Obrador d’Oriol Rossell, un negocio familiar que se inauguró en 1918 bajo el nombre de Ca l’Altet y con la panadería como actividad principal, es ahora una pastelería, cafetería y tienda gourmet cuya batuta lleva el bisnieto del creador y que luce un Solete Repsol, además de una Fava d'Or que le sitúa como mejor pastelería del Camp de Tarragona y las Tierras del Ebro.

L'Obrador Oriol Rossell
Pastel de algarroba | L'Obrador Oriol Rossell

Formado en la Escuela Hoffman, Rossell trabaja codo con codo con su pareja, Maria Vidal, para ofrecer un gran surtido de productos, que van desde las cocas dulces y saladas a la bollería, los pasteles y otros bocados. Las combinaciones y los productos innovadores, más allá de los clásicos siempre presentes, son una seña de identidad de un obrador en el que los ingredientes siempre son de temporada y de proximidad, desde las cocas hasta los pasteles o lo rellenos de sus famosos croissants. 

En la Plaça Vella, bajo el campanario custodiado por el ángel soldado Tobías, se encuentra L’Alquimista, una heladería que se erige como un proyecto gastronómico de proximidad e innovador dirigido por los dueños de L’Enxaneta, que cuenta con un socio especial: el chef Jordi Guillem, excocinero de Le Méridien Ra Beach Hotel & Spa y subcampeón del mundo del Gelato World Cup en dos ocasiones.

L'Obrador Oriol Rossell
Croissants de higos y mascarpone | L'Obrador Oriol Rossell

Entre su oferta, helados con leche fresca y productos de proximidad como higos ecológicos, melocotón de Ordal, arroz con leche del Molí de Rafelet o avellana de Reus, además de repostería, productos veganos y sin gluten, sorbetes, chocolate caliente, bombones, bizcochos, mochis, crêpes y otros dulces estacionales, como el panettone o los turrones. 

Siguiendo las calles peatonales del centro del pueblo se pueden encontrar otros negocios con una buena oferta dulce, como Fargó, una pastelería y cafetería degustación cerca de la concurrida Plaça Nova regentada por Cesc Armengou y Emma García. Con la experiencia de ambos en el Hermitage de Andorra, en el Le Méridien Ra Beach Hotel & Spa y junto a Nandu Jubany, además de los Hermanos Roca en el caso de Cesc, han decidido cumplir un sueño y crear un negocio propio donde ofrecen servicio de cafetería y delicias como los típicos bufats de Vendrell, cocas, pasteles, buñuelos o milhojas, entre otros dulces.

Y acompañado de todos estos dulces no puede faltar un buen café. El Rusc es el primer tostador artesano de café de especialidad de la provincia. Ubicado frente al mercado, Daniel, con la ayuda de Federica, ha abierto al público no solo una tienda donde muele y tuesta cafés de procedencias como Centroamérica, América Latina o África, sino que también asesora con mucho gusto a todos aquellos cafeteros que quieren aprender más sobre este mundo. 

Su nuevo espacio para talleres, cursos y catas acaba de abrir al público para mostrar nuevos sabores y formas de elaborar buen café rompiendo barreras y mitos y asesorando en todo momento. Además, un pequeño rincón aguarda a aquellos que quieran sentarse a degustar alguna de sus elaboraciones antes de pasar por caja y llevarse un café justo y de calidad procedente de cooperativas en el que el respeto por el medio ambiente y el trabajo de los que lo cultivan es una prioridad.

OTRAS RECOMENDACIONES

En El Vendrell también existen negocios con mucha solera. Uno de ellos es el Restaurante Pizzería Trastevere, la primera pizzería del pueblo. Sus dueños se lanzaron a la aventura y bautizaron el local con el nombre del barrio de Roma que les hizo decidirse. Ahora, sus hijos llevan las riendas de un lugar cuya carta tiene una base tradicional pizzera con un buen surtido de ensaladas y platos típicos, como risottos, carpaccios y quesos, además de carne de la comarca y postres caseros, helados y sorbetes.

Masia Francàs
Masia Francàs

A tan solo a un km de la tienda Jané Winestore, se alza el Restaurante Masia Francàs, una construcción del siglo XII perteneció al Rey Martí I y ahora dirigida por el chef italiano Tony Greco, con más de 50 años de experiencia. Más allá de sus jardines idílicos, los clientes se maravillarán con algunos de sus platos más famosos, como el risotto, elaborado en el interior de la rueda de parmigiano, los raviolis de trufa blanca y setas con gorgonzola o los gnocchi alla sorrentina.

Volviendo a la costa de Comarruga, a escasos metros del Riuet, se encuentra Casa Pepe, un local de marcada gastronomía marinera que mira al mar desde hace más de 45 años. Este humilde local es famoso por sus tapas de delicias marineras, como calamares, sevillanos y almejas, y sus paellas, como la de bogavante o el arroz de temporada con conejo y calçots.

Restaurant Xaloquell
Facebook Restaurant Xaloquell

Más cerca del Restaurant Vila Casals se halla el Restaurante Xaloquell, a dos calles del paseo marítimo, que inició su andadura en los años 70 y tuvo mucho éxito como lugar para celebrar eventos. A lo largo de estos 50 años se han hecho cambios, introduciendo una bodega y reformando el espacio para seguir organizando fiestas, comidas y cenas donde reinan las fideuás y los suquets, pero también los ahumados, el marisco y un gran surtido de carne, pescado, pastas y oferta vegana.