En pleno entorno rural en el pueblo de Barrika, en Vizcaya, y muy cerca de la playa se encuentra un caserío con más de 500 años de antigüedad en donde ha surgido un proyecto vinculado a la gastronomía, el arte y la inspiración. Un caserío tradicional con una larga historia a sus espaldas que a día de hoy acoge un concepto, tan moderno como antiguo, a través del cuál se busca reivindicar lo auténtico, lo hecho a mano y lo de toda la vida poniendo por encima de todo el amor sobre lo que hacen.