En 2023 será posible pasear por la arena del Coliseo Romano donde antaño luchaban los gladiadores gracias a un proyecto que recuperará su aspecto original. Con la sostenibilidad y la innovación como elementos principales, el Anfiteatro Flavio contará con una arena móvil que permitirá a los visitantes ver "la majestuosidad del monumento", anunció el pasado 2 de mayo el ministro de Cultura italiano, Dario Franceschini.

Ecosostenible y retráctil
Con el objetivo de dotar de un suelo al Anfiteatro Flavio, que en la actualidad cuenta con sus estructuras subterráneas al aire libre a excepción de una pequeña parte de unos 600 metros cuadrados que ha permanecido tapada, el proyecto cubrirá todo el suelo permitiendo recrear el monumento tal y como era originalmente, así como una mayor conservación de las estructuras subterráneas.
Siete años después de que se dieran los primeros pasos para devolver al Coliseo su arena, finalmente la empresa ganadora del concurso Milan Ingeniería realizará una platea de unos tres mil metros cuadrados construida con materiales ecosostenibles y respetuosos con el resto del edificio que podrá abrirse y cerrarse para dejar al descubierto sus espacios subterráneos.
La plataforma se construirá con materiales "extremadamente ligeros", como la madera Accoya, obtenida mediante un proceso especial que aumenta su resistencia y durabilidad y que evita la tala de otras especies más vulnerables. La estructura contará con 24 unidades de ventilación mecánica distribuidas a lo largo del perímetro para controlar la temperatura y la humedad de los espacios subterráneos. Gracias a esto, en sólo 30 minutos se garantizará el cambio completo de aire.
Además, el futuro suelo del Coliseo tendrá un sistema con el que recogerá el agua de la lluvia para después emplearla en el suministro de los baños del edificio.
El nuevo antiguo Coliseo
En palabras de Franceschini, es "un paso más hacia la reconstrucción de la arena, un ambicioso proyecto que ayudará a la conservación y protección de las estructuras arqueológicas recuperando la imagen original del Coliseo y devolviéndole además su carácter de compleja máquina escénica".
Aparte de ofrecer una experiencia novedosa al visitante, esta nueva arena permitirá que el edificio Flavio pueda acoger grandes espectáculos, aunque no de forma habitual y siempre que no pueda suponer un peligro para su conservación.
El ministro es consciente de que la intervención generará debate entre historiadores y arqueólogos: "esta obra creo que creará debate como es natural (...) pero en mi opinión aporta un gran valor conjugando sostenibilidad, protección e innovación tecnológica", defendió.