Está claro: el enoturismo ha llegado para quedarse. De hecho, en 2019, las visitas a bodegas crecieron un 3,9% según los últimos datos facilitados por ACEVIN. Esto ha provocado que en los últimos años hayan surgido diversas propuestas para disfrutar del viñedo de una forma diferente. Una de ellas es Pinea, una eco-suite sobre ruedas, única en su especie. La idea, surgida del estudio ERA Architects, ha echado el freno de mano en el Penedés, un entorno idílico para dormir rodeado de viñas. De este modo se puede conectar con la naturaleza... las 24 horas del día.