La temporada de nieve está a la vuelta de la esquina. No será una temporada más, como no lo fue la pasada, con un final prematuro. Son tiempos de COVID-19. Y el esquí no ha sido ajeno al vuelco que ha provocado la pandemia. El escenario cambiante por las medidas sanitarias ha alimentado una incertidumbre en el mundo de la nieve que poco a poco se ha disipado para arrojar algo de claridad sobre el futuro inmediato de esta temporada.
Tanto las estaciones a título particular como las asociaciones como ATUDEM (Asociación Turística de Estaciones de Esquí de Montaña) como ACEM (Asociación Catalana de Estaciones de Esquí y Actividades de Montaña) como los propios Gobiernos han trabajado para establecer unos protocolos de medidas COVID que les permitan iniciar su actividad.