Mr. Jordaan
Imaginar el perfecto hotel en Ámsterdam es, casi, lo más parecido a visualizar Mr. Jordaan. Todo aquí es un poco diferente, un poco especial. Alojarse en Mr. Jordaan es como quedarse a dormir en la casa de ese amigo que acaba de mudarse a Ámsterdam y que, encima, ha tenido la suerte de encontrar un coqueto piso de suelos de madera, muebles acogedores y bonitas vistas al canal. O lo que es lo mismo, dos casas ubicadas en un tranquilo canal de aires afrancesados en el barrio de Jordaan, muy cerca de la Casa de Ana Frank. Al igual que en el apartamento de ese amigo que vive en Ámsterdam, el ambiente en Mr. Jordaan es bastante actual, con una personalidad peculiar y con muchas (o todas) de las comodidades que se buscan en un hotel. Las habitaciones son de tamaño modesto pero muy cómodas, y algunas de ellas tienen vistas al canal. Resulta complicado destacar lo mejor de este hotel tan especial, tan personal, pero su equipo humano, amable y servicial, y su suculento desayuno (los amigos siempre agasajan con lo mejor) pueden ser algunas de las más destacables.
Precios desde 150€
Foto: NH Collection Doelen
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NH Collection Doelen
Alojarse en este hotel del centro de Ámsterdam es como hacerlo en una obra de arte, y puede sonar como una frase hecha, pero no lo es. Tampoco lo es el hecho de saber que se trata de uno de los alojamientos con más historia de Ámsterdam, sobre todo porque es el hotel más antiguo de la ciudad. Ubicado en el fabuloso esquinazo que forman el canal Kloveniersburgwal y el río Amstel, el edificio que ocupa el hotel fue la sede de los milicianos que aparecen reflejados en uno de los más famosos de Rembrandt, La Ronda de noche. Fueron los propios milicianos quienes encargaron al artista holandés esta pintura, que estuvo colgada durante más de 100 años en este edificio, y más concretamente en una de las habitaciones del hotel de la que hoy cuelga una réplica (el original hoy se encuentra en el Rijksmuseum). En el siglo XIX, y ya convertido en hotel, el edificio continuó alimentando su propia leyenda proporcionando alojamiento a personajes ilustres de la época como la emperatriz Sissi; para privilegio de los huéspedes del NH Doelen, hoy una de esas suites lleva el nombre de la emperatriz y de su techo cuelga la misma lámpara de araña que iluminó su habitación original.
Precios desde 300€
W Ámsterdam
Un cúmulo de contrastes que encajan a la perfección con forma de hotel. Este podría ser un buen titular para definir en menos de una línea uno de los hoteles más cool de Ámsterdam, el hotel W. Ubicado de forma privilegiada (el grupo Marriott no se anda con tonterías) en un antiguo edificio de la década de 1920, así como en un antiguo banco de 1906 al otro lado de la calle (son dos edificios enfrentados), el W tiene del siglo XIX solamente el (los) edificios, puesto que su interior sorprende con un diseño vanguardista, sello indiscutible de la casa. Habitaciones espaciosas, diferentes ambientes (en el lobby tienen hasta chimenea) y una terraza en la azotea con vistas al Palacio Real que resulta bastante insuperable (y tentadora), sobre todo si lo que se tiene delante es su piscina. Aquí se encuentra también el restaurante Mr. Porter, encargado de la bacanal que suponen los desayunos de este hotel donde los zumos ‘Cold press’ realizados con los ingredientes más naturales son las estrellas del buffet. Dispone además de imaginativos platos y, por si esto no fuera suficiente, un menú adicional donde pedir platos al gusto (la tostada de aguacate con huevo poché es simplemente sublime).
Precios desde 250€
Foto: Motel One Ámsterdam
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Motel One Ámsterdam
¿Se puede tener un buen hotel de diseño imaginativo, buenas camas, mejores duchas y un servicio 5 estrellas a un precio reducido? Sin duda. Motel One es buena prueba de ello. ¿La pega? Está un poco alejado del centro, pero se puede acceder fácilmente a los principales lugares de interés en transporte público o en bicicleta, y el tren del aeropuerto se detiene casi en la puerta. ¿A que ya no parece una pega? Menos aún sabiendo que el centro de congresos RAI de Ámsterdam está cruzando la calle. Motel One ofrece un interesante desayuno que se sirve en su lobby donde se pueden encontrar panes orgánicos y mermeladas, embutidos, quesos (por favor, esto es Holanda), fruta fresca, crujientes croissants y huevos al gusto. Para otro momento del día, su bar ofrece cócteles clásicos fenomenalmente preparados así como una variedad de bebidas artesanas locales. Y siempre hay mucho ambiente en él.
Precios desde 80€
Foto: Conservatorium
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Conservatorium
Alojarse en uno de los mejores hoteles de lujo en Ámsterdam no es barato, pero sí tremendamente placentero. Aquí van los motivos. Conservatorium es un hotel que lo tiene todo, o casi; ambiente urbano pero estilo elegante, habitaciones amplias, un emblemático edificio del siglo XIX en el que refugiarse y una ubicación única entre la explanada de los museos y la calle de moda en Ámsterdam, la impronunciable Van Baerlestraat. Si a esto se le suma el mejor lobby-salón de la ciudad, ya tenemos el perfecto hotel donde alojarse en el centro de Ámsterdam. La suntuosa experiencia que supone alojarse en el Conservatorium viene acompañada, además, de saber que el hotel dispone de uno de los spas más imponentes de la ciudad, o de toda Holanda, el Akasha Holistic Wellbeing Centre, que ocupa un espacio subterráneo de más de 1000 m². Una delicia para los sentidos que se completa con un cóctel en el Lunes Bar, ‘the place to be’ en Ámsterdam, y se remata con la música de reconocidos DJ’s en directo.
Precios desde 450€
![W Ámsterdam](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 0 0"%3E%3C/svg%3E)