La playa de Guadalmansa lo tenía todo para albergar uno de los hoteles más exclusivos de la Costa del Sol: los cimientos de un antiguo hotel, ubicación en primera línea de mar y un aeropuerto internacional a menos de una hora en coche. Ikos Andalusia también lo tenía todo para triunfar en este rincón del litoral malagueño: la esencia mediterránea impregnada en cada una de sus 21 hectáreas y el concepto Infinite Lifestyle, donde todo está incluido y todo es posible. Así, en esta perfecta simbiosis, el primer hotel de Ikos Resorts en la Península Ibérica debutó el pasado mes de abril como una de las grandes aperturas del año.