Más allá de visitar lugares fascinantes y relajarse en las mejores playas de España, el verano puede ser el momento perfecto para ejercitar el cerebro, el órgano motor de todo el organismo que, como si se tratase de un músculo cualquiera, necesita usarse para ser fortalecido.
Del mismo modo que el ejercicio físico mantiene el cuerpo activo y saludable, ejercitar el cerebro es esencial para estimular la función cognitiva y los procesos mentales, pues mejora la memoria y la atención, impulsa la creatividad, previene el deterioro cognitivo y mantiene el cerebro más joven y sano. “El cerebro es como una carretera paradójica. Cuantos más coches pasan por una carretera, más se desgasta el asfalto; sin embargo, con el cerebro ocurre lo contrario, y es que cuanto más se usa más se activa”. Son palabras del neuropsicólogo español José Antonio Portellano, profesor en la Universidad Complutense de Madrid.
EL ELEMENTO CLAVE: LA MIELINA
Del correcto funcionamiento del sistema nervioso se encarga, en parte, la mielina, un líquido blanco y de textura grasa que rodea a las células nerviosas, aislándolas, protegiéndolas y acelerando la transmisión de información entre ellas. En concreto, en el cerebro, constituye todo el fluido en el que se sumergen los diferentes elementos y favorece la transmisión de impulsos eléctricos entre las neuronas.
Si el cerebro no se ejercita, la mielina se va debilitando y desapareciendo, con lo que empeora la calidad de los impulsos nerviosos. Ejercitarlo, por el contrario, consigue reparar la pérdida de mielina y agudizar la rapidez mental, de acuerdo con un estudio de 2019. En un estudio anterior ya se había visto que aprender nuevas habilidades motoras produce un aumento en la mielinización del cerebro.
EVITAR EL DETERIORO COGNITIVO
Si no se ejercita a través del estudio, el aprendizaje de nuevas habilidades, los juegos de memoria, los pasatiempos u otros, con la edad puede aparecer lo que se conoce como deterioro cognitivo leve, un declive en la capacidad neuronal que afecta a la memoria, el lenguaje o las habilidades de pensamiento, aunque que no interfiere significativamente con las actividades diarias. Se considera una fase intermedia entre el deterioro de la memoria que ocurre con la edad y la demencia.
En este sentido, hacer crucigramas, puzzles o actividades de lógica puede reducir la incidencia futura de demencia en personas con deterioro cognitivo leve e, incluso puede revertir el deterioro en algunos casos y acelerar la capacidad de asimilación del conocimiento, de acuerdo con un estudio de la Escuela de Medicina Johns Hopkins, en Baltimore.

Pasatiempos. Libro de actividades para adultos (Ed. RBA)
BENEFICIOS DE LOS PASATIEMPOS
A este respecto, los pasatiempos se convierten en elementos ideales para el entrenamiento de la memoria y la activación del cerebro. Por ejemplo, según una investigación realizada en más de 19.000 personas, dirigida por la Universidad de Exeter y el King's College de Londres, los adultos de 50 años o más que hacen crucigramas y acertijos numéricos (sudokus) de forma habitual tienen cerebros más agudos y un pensamiento más nítido. Se vio que, cuanto más regularmente se practicaban estos pasatiempos, mejor era el desempeño de las tareas que evaluaban la atención, el razonamiento y la memoria.
De acuerdo con los investigadores, las personas que practican crucigramas tienen una función cerebral equivalente a diez años más jóvenes que su edad real en pruebas que evalúan el razonamiento gramatical y ocho años más jóvenes que su edad en pruebas que miden la memoria a corto plazo.
EJERCITA TU CEREBRO CON PASATIEMPOS EN VERANO
Las vacaciones de verano están hechas para descansar y alejar el estrés, pero también son un momento ideal para mantener el cerebro activo con actividades divertidas y estimulantes como los pasatiempos, ya que el cerebro sufre un bajada de rendimiento y de trabajo debido a la ausencia de retos mentales, como los que se dan en el ambiente laboral.
El nuevo libro "Pasatiempos: Libro de actividades para adultos" de RBA ofrece multitud de juegos para ejercitar el cerebro, como crucigramas, desafíos de memoria, sudokus, juegos de lógica, tests de cultura, enigmas, laberintos y mucho más.
Su formato en papel te permite, además, algo tan necesario durante las vacaciones como es desconectar de las pantallas y, simplemente, disfrutar del roce del lápiz contra el papel.