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Llega a Nueva York el carnaval más 'instagrameable'

Super Funland es el nuevo espacio del Museum of Sex que promete un carnaval de lo más circense.

Cierto que este año es el 150 centenario del Metropolitan, que todo el mundo quiere ir al nuevo MoMA, pasear por Hudson Yards o, sencillamente, acudir a cualquiera de los centenares de exposiciones y eventos de la agenda de Nueva York, uno de los destinos culturales indiscutibles para el 2020; pero lo cierto es que habrá que dejar un hueco para visitar la nueva instalación lúdica e inmersiva del Museum of Sex: Super Funland promete ser el carnaval más maravillosamente bizarro e ‘instagramableable’ de todo Manhattan. 

 
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Journey into the Erotic Carnival Sign 2 - Kris Graves

Foto: Super Funland | Kris Graves

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Carnaval underground

El Museum of Sex es algo así como el MoMA, pero en versión Rocco Siffredi. Eso sí, desde su apertura en 2002, el objetivo ha sido más antropológico que pornográfico, colaborando con diversas instituciones culturales, artistas y académicos para  preservar y presentar la historia y el significado cultural de la sexualidad humana. En ese sentido, esta vez el museo presenta Super Funland: Journey into the Erotic Carnival, su exposición más grande e inmersiva hasta la fecha. Por su parte, la exposición permanente del museo está compuesta por más de 20.000 artefactos y piezas como trabajos de arte, fotografías, ropas y disfraces, preservativos, juguetes sexuales o inventos tecnológicos.

Stardust Lane - Diorama 1 - Kris Graves

Foto: Super Funland | Kris Graves

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¡Ha llegado el circo a la ciudad!

Journey into the Underground Carnival se reparte a lo largo de cuatro pisos de diversiones estéticas (y sexuales) creadas por destacados artistas y diseñadores que muestran cómo los carnavales y los circos han convivido siempre con el deseo, el juego y el cuestionamiento de normas sociales como sexuales. Inspirado en estos aspectos sociales y artísticos de las atracciones históricas circenses itinerantes, Super Funland reinterpreta las emociones y pasiones reprimidas, desdibujando la línea entre el arte y la experiencia e invitando a los visitantes a participar.

 
Overview Shot 3 - Kris Graves

Foto: Super Funland | Kris Graves

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Viva el terciopelo

Estéticamente, Super Funland es el resultado de haber metido en la coctelera detalles del universo de David Lynch, Quentin Tarantino y Tim Burton, algo del colorido del pop-art, bastante terciopelo y espejos psicodélicos y mucha picardía de la mejor escena burlesque. El resultado es un itinerario de lo más explícito y divertido a través de las diversas instalaciones artísticas. Aquí no hay sesudos discursos intelectuales tras las obras, sino la simple (y necesaria) alegría de cuando llegaba al circo a la ciudad.

Deity Derby Still - Kris Graves

Foto: Super Funland | Kris Graves

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Inmersión lúdica

La exposición comienza a modo de introducción con la historia viva de Al Stencell, especialista que documentó el submundo circense de los espectáculos burlescos y del striptease. La exposición sigue por un cine inmersivo de 180 grados, donde una película ilustra los orígenes del carnaval. Se pasa por el  "Stardust Lane", un caleidoscopio gigantesco, para continuar un recorrido emocionante entre piezas que incluyen diferentes dioramas más o menos explícitos, vídeos en blanco y negro, máquinas que ponen a prueba las habilidades de los visitantes para conseguir premios, un fotomatón muy curioso, un túnel del amor muy particular y al finalizar el recorrido, un Lollipop Lounge para celebrar la alegría sin tabús. Hay cócteles temáticos, y quizá hasta algodones de azúcar...

Overview Shot 3 - Kris Graves