Plantar un árbol podría ser la mejor forma de despedir 2020 y de dar la vuelta a un año marcado por la pandemia de la covid-19. Así lo ha considerado Turismo de Nueva Zelanda, que junto a Trees That Count invita a la población mundial a plantar un árbol en Forest of Hope, dos nuevos bosques ubicados en Queenstown y en Northland que quieren representar la esperanza de 2021.