Para muchos nostálgicos, la noticia no está en la apertura del nuevo aeropuerto de Berlín Brandenburgo -ni aunque se haga con un inusitado retraso de nueve años para ser alemanes-, sino en el cierre de operaciones definitivo del Tegel-Berlín, uno de los aeropuertos más queridos de Europa. Su arquitectura y su estética recordaba a los años 1970 y sus defensores señalaban el óptimo diseño interior que facilitaba la circulación para el embarque; pero lo cierto es que el tiempo no pasa en balde y el aeropuerto de Tegel, igual que el de Schönefeld, se había quedado atrás en cuanto a los estándares aeroportuarios actuales.
El próximo 8 de noviembre, un Airbus A321 operado por Air France con destino a París Charles de Gaulle será el último en sobrevolar la torre de control del icónico aeropuerto. También fue un avión de la misma compañía francesa el que aterrizó por primera vez en el Tegel, en el año 1960.