La historia de Tarragona aflora por cada rincón de la ciudad, pero también de la provincia. Su relevancia histórica pasa por ser segunda ciudad más importante del Imperio Romano, que le ha hecho valerse su fama como un enclave único en Europa. Y esto es, sin duda, gracias al legado que conserva, a su clima y a la marca Costa Daurada. Los pueblos que conforman Tarragona conservan un patrimonio romano y medieval en forma de murallas y ruinas, pero también de iglesias góticas y románicas. Y todo en medio de parajes naturales como las montañas de Prades o els Ports.