Tánger
Otra propuesta mediterránea, ésta en el norte de Marruecos. Tánger ha fascinado e inspirado a artistas como Eugène Delacroix, Henri Matisse, Paul Bowles, Tennessee Williams, Jean Genet por citar algunos de los muchos personajes que sucumbieron al encanto de esta ciudad. Hay que perderse por la laberíntica medina y la plaza del Zoco Chico con sus cafés, contemplar el antiguo palacio de Mendoub, construido en 1929, pasear por la plaza del Zoco Grande, muy animada al anochecer, y sobre todo, acercarse al mar y vagar por el Paseo Marítimo. Tánger es ciudad de mitos, así que una de las paradas debe ser en el antiguo café Hafa para tomar un té a la menta frente a una panorámica inigualable sobre el estrecho y la costa española. Desde Tánger se pueden hacer varias excursiones cortas y muy recomendables: al cabo Espartel y las grutas de Hércules y al pueblo de artistas de Asilah.