Hay aromas, matices, texturas y hasta ensoñaciones que permiten derribar las fronteras entre el balcón y el resto del mundo. Con esta filosofía, Cruzcampo ha creado dos nuevas cervezas que confirman que esta bebida es mucho más que lúpulo, cereal, levadura y agua. Es una ventana abierta a sabores que evocan a patio andaluz, a jardín primaveral, a sol, cervecita y terraza...
Primavera con espuma
La primera de ellas es Edición Limitada Primavera, la primera referencia de esta cervecera dedicada a una sola estación pero... ¡qué estación! Diseñada por los maestros cerveceros Juan Navarro, Jorge Varela y Juan Jiménez en La Fábrica de Cruzcampo de Málaga, esta receta es todo un viaje a la época de la alegría por antonomasia. Su esencia es artesana, ya que sus sabores a cereal y a frutas tropicales provienen de la mezcla equilibrada de lúpulos americanos que, además de darle estos matices, garantizan un bajo amargor. En definitiva, es esa cerveza con la que culminar un paseo... o con la que iniciar un viaje organoléptico.
Explosión cítrica
Andalucía es frescura, flores, naranjos, limones y mucho sur. Una definición que nadie discutiría, de ahí que Cruzcampo Andalusian IPA sea una sinécdoque ideal de esta región. Lo mejor de esta nueva creación es que no hace falta ser un sumiller cervecero para comprender que aquí los cítricos están presentes sin estarlo. Es decir, que está en su frescor, en sus matices mezclados con toques herbáceos que trasladan directamente al sur. Y todo ello casi de forma involuntaria, consiguiendo que ese patio andaluz aparezca en el paladar mientras se disfruta de un buen sorbo de cerveza.