Toca volver a respirar profundamente, sentir la libertad, el espacio abierto. Toca moverse, volver a viajar, aventurarse. Toca recuperar las sensación de pisar un paisaje virgen, de probar un sabor inolvidable, de compartir juntos bellos momentos. Y todo esto, lo que realmente importa, se puede encontrar en Francia, en el corazón de zonas naturales excepcionales mientras se descubren los secretos de un rico patrimonio histórico y cultural y de una gastronomía que pone el toque sublime a la experiencia. Sí, toca volver a vivir y a disfrutar del placer de lo auténtico, comenzando por estas pistas...