Planes para disfrutar de Región de Murcia al aire libre

Más allá de los tópicos, toda la región es un destino ideal para llenar de oxígeno los pulmones y disfrutar de la naturaleza tanto como de la gastronomía.

Lo mejor de la Región de Murcia no es sólo su costa plagada de playas, ni sus huertas, ni su gastronomía, ni su patrimonio cultural, ni sus pueblecitos, ni sus senderos, ni sus paisajes. Que va, lo mejor es que se puede disfrutar de todos estos tesoros sin tener que mirar el calendario antes de programar un viaje. Y eso es posible gracias a sus 300 días de sol al año y a las suaves temperaturas que hacen del clima un sueño. No es extraño que toda la región se haya convertido en uno de los destinos estrella a la hora de hacer una escapada para disfrutar de la vida al aire libre. 

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Foto: Turismo Región de Murcia

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Horizontes de naturaleza

Desde el litoral, hasta el interior, la Región de Murcia es un universo natural con infinidad de rincones para descubrir. Una toma de contacto con los espacios naturales que se puede realizar de la forma que cada cual prefiera: sobre una bici, dándole a las piernas, a trote de caballo, paseando relajadamente o, por qué no, escalando paredes verticales. 

Si lo que se busca es respirar a pleno pulmón, lo mejor será poner dirección a Sierra Espuña, el auténtico “pulmón verde” de la región, donde disfrutar de un paisaje de inspiración mediterránea. A sólo 40 km de la capital, los diferentes senderos del Parque Regional de Sierra Espuña se pueden recorrer o bien practicando el senderismo o montando en bicicleta de montaña. Además hay diversidad de senderos temáticos y actividades familiares de todo tipo. Ello sin olvidar una pequeña constelación de seis pueblos de especial encanto.

 
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Foto: Turismo Región de Murcia

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Paisajes de fantasía

Otro de los ‘regalazos’ naturales de la Región de Murcia es el Barranco de Gebas, un lugar insólito entre badlands calcáreos de formas caprichosas y aguas turquesas del Embalse de la Rambla de Algeciras, donde lo desértico, las colinas erosionadas y los cañones despiertan la fantasía de todos los viajeros. En cierto modo, es algo parecido a pasear por la luna pero sin abandonar el planeta. La panorámica total de estos parajes se obtiene desde el Mirador de Gebas. 

Si lo que se busca es seguir disfrutando de los caprichos naturales, se puede seguir por  el Parque Regional de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar, un humedal de vital importancia para los flamencos que lo han convertido en su hogar. Son precisamente estas aves y los horizontes infinitos reflejados en la superficie del agua, los que encienden la imaginación de quienes se animan a realizar un paseo por los distintos ambientes del parque. 

 
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Foto: Turismo Región de Murcia

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Paraíso playero...

La Región de Murcia es el destino de los que persiguen un verano eterno. Desde las orillas del Mar Menor a las del Mediterráneo, la Costa Cálida es un universo fabuloso de playas, de las que en casi una treintena ondea la bandera azul. Desde el Mar Menor hasta Águilas, 250 kilómetros de arenales en los que hay mucho donde elegir según sea el plan. Doblando hacia Cabo de Palos, aparece el Parque Regional de Calblanque, un oasis de tranquilidad y rincones vírgenes. Es la joya de la costa murciana, con sus dunas fósiles y su arena dorada. Si lo que se busca es un poco de adrenalina playera, lo mejor es acercarse hasta el Mar Menor, epicentro de la vela y del windsurf en la región. Los diferentes clubes, puertos y escuelas deportivas brindan la mejor infraestructura para disfrutar de estas disciplinas.

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Foto: Turismo Región de Murcia

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y gastronómico

Foodies y amantes del buen comer en general tienen en la Región de Murcia uno de sus destinos gastronómicos soñados. Más ahora, que como Capital Española de la Gastronomía 2020 y 2021 maximiza sus excelencias: son 1.001 sabores los que prometen, y no se quedan cortos porque tienen una despensa privilegiada que va desde el pescado y los salazones a la huerta murciana. Para no perderse nada hay que poner el ojo en alguno de los sabores con denominación de origen de la región, como el queso al vino, el arroz de Calasparra o el pimentón de Murcia. Y, por supuesto, el tapeo, con 'la marinera' como máximo representante: una rosquilla de pan con ensaladilla coronada por una anchoa. No se queda atrás el pastel de carne, que es un hojaldre relleno de ternera, chorizo, huevo y especias. Y para terminar nada como un potente 'café asiático'.

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Foto: Turismo Región de Murcia

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Un patrimonio culinario

No hay que olvidar que la gastronomía también marida con el paisaje. Así, si lo que se quiere es combinar cocina y paisajes marinos, lo mejor es disfrutar de un ‘arroz caldero’ en alguna de las terrazas con vistas al Mar Menor. Más que un plato, es toda una institución cultural que concentra los sabores de la región, arroz y pescado. Toma su nombre de la olla de fundición que se sigue usando al igual que la que empleaban los pescadores en sus salidas al mar. Como suele ocurrir en estos platos de origen humilde, se trataba de aprovechar aquello que no era apto para la venta en los mercados. Hoy, es toda una delicia murciana.

 
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Foto: Turismo Región de Murcia

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Y muchas estrellas

Y si se buscan delicias, a veces hay que mirar hacia las estrellas. No las del firmamento, sino las de los restaurantes con estrella Michelin que hay en la Región de Murcia. Ideales para más de un capricho foodie: la Cabaña Buenavista, en la ciudad de Murcia y con dos estrellas Michelin, es la interesante propuesta del chef Pablo González, que innova con constantes guiños al recetario murciano; o el Restaurante Magoga, en Cartagena y con una estrella Michelin se han convertido ellos mismos en un destino viajero. Alrededor de los mismos, orbitan un buen número de propuestas alejadas de los convencionalismos.