Santiago de Compostela es historia con mayúsculas. Por sus calles se respira su pasado milenario y la estela de todos los peregrinos que han llegado y siguen llegando a la Catedral, dotando la ciudad de un halo espiritual, misterioso, intelectual y apacible. Rezuma cultura y naturaleza por los cuatro costados, convirtiéndose en el escenario perfecto para que el viajero descubra en el corazón de Galicia una historia y un entorno fascinantes.