Su rico patrimonio en ámbitos como el folklore, la gastronomía, la arquitectura o la literatura, hacen de Andalucía un lugar que rebosa historia y magia y que promueve un turismo responsable y comprometido tanto con su gente como con quien se acerca a conocerla.

Junta de Andalucía | Parque Natural Sierra Magina, Jaén
1. Diversidad natural...
No cabe duda de que Andalucía es un territorio rico en naturaleza. Más del 30% de su superficie está bajo alguna figura de protección ambiental, como, por ejemplo, el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, el parque natural más extenso de España y el segundo de Europa, ubicado en la provincia de Jaén.
También cuenta con nueve Reservas de la Biosfera, entre ellas la Sierra de Grazalema – que guarda también pueblos de gran belleza–, además de tres parques nacionales –Sierra Nevada, Sierra de las Nieves y Doñana– y más de 64 millones de olivos, que forman el bosque humanizado más grande del planeta. En Almería, la Geoda de Pulpí, la mayor visitable del mundo, es otra de las atracciones que el entorno andaluz ofrece a sus habitantes y visitantes de alrededor del planeta.

Junta de Andalucía | Ermita de la Virgen del Espino, Sevilla
2. ...y cultural
Las grandes ciudades andaluzas guardan una gran importancia por el aspecto cultural que las tradiciones, la arquitectura y la historia le han impreso con el paso de los siglos. Con tres de ellas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO – Úbeda, Baeza y Córdoba – y otras con numerosos monumentos de importancia incalculable, como la Alhambra de Granada, el Alcázar de Sevilla o la Ciudad califal de Medina Azahara, las localidades andaluzas tienen mucho que contar.
Andalucía se descubre como una gran guardiana también del folklore y de artes tan diversas como el flamenco y la alfarería, sin olvidar sus celebraciones religiosas, como la Semana Santa, la Romería de la Virgen del Rocío o las Cruces de Mayo, entre tantas otras de carácter laico, como las Carreras de Caballos de Sanlúcar, que también congregan cada año a gran cantidad de curiosos y aficionados. La sabiduría de antiguos oficios, el legado de otros pueblos en su gastronomía o la huella que muchos literatos dejaron repartida por su geografía convierten a la región en un enclave donde la cultura no tiene fin y se filtra en todos los estratos de la sociedad.

Junta de Andalucía | Minas de Riotinto, Huelva
3. Un turismo comprometido
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible que adoptó la Asamblea General de la ONU planteó hace ocho años un total de 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible para hacer del planeta un lugar más habitable y cuidarlo como se merece. Para ello, Andalucía se ha comprometido a fomentar un turismo responsable a la par que atractivo poniendo en valor la riqueza del territorio a la vez que se potencian y se conservan sus particularidades.
Para mostrar la riqueza de la región se han impulsado oficios y saberes tradicionales, como la jábega, un arte de pesca, o el bordado en oro de Jerez, además defomentar actividades centradas en el patrimonio geológico y la biodiversidad del territorio, como visitas a la Caldera Volcánica de Rodalquilar o al Flysch de Punta Carnero y rutas como la de los Amonites de las Sierras Subbéticas.

Junta de Andalucía | Sanlúcar de Barrameda, Cádiz
4. La sostenibilidad como objetivo
Para seguir los principios de sostenibilidad y minimizar el impacto sobre el medio ambiente y la cultura local se necesita que el turismo mire hacia un tipo de turismo más inmerso en el territorio y menos superficial. Conocer los secretos de la vida marina, realizar rutas geológicas como las del Parque Minero de Riotinto o disfrutar de algunos de los observatorios astronómicos de Europa son algunas de las actividades que forman parte de un plan adecuado para la comunidad.
Una apuesta por zonas turísticas amables y el consumo responsable lleva al visitante a vivir una experiencia adecuada al territorio y a la divulgación de ámbitos como la botánica en lugares como el Jardín Botánico-Histórico de Málaga La Concepción, la paleontología en la estación de Río Fardes Fonelas o la mineralogía en el Museo del Cobre de Cerro Muriano.

Junta de Andalucía | Playa de las Arbequillas, Málaga
5. Visión de futuro
La calidad frente a la cantidad es una de las máximas que Andalucía busca abanderar para atraer un turismo mejor y también para ofrecer a aquellos que vienen la mejor de las experiencias. Para ello, el avance en la digitalización e innovación de las zonas rurales y de interior, además de potenciar la economía verde y la sostenibilidad, son aspectos vitales. Crear una oferta inclusiva que desestacionalice el atractivo de las provincias andaluzas es uno de los pasos más importantes para conseguir un futuro mejor para todos. No hay que olvidar que la seguridad en términos sanitarios es cada vez más importante, y para ello existe el sello Andalucía Segura.

Junta de Andalucía | Cabo de Gata, Almería
6. Una región accesible e inclusiva
En Andalucía no se quiere dejar a nadie atrás, por lo que desde hace años goza de la fama de ser un destino accesible al cien por cien. Sus conexiones son de alta calidad tanto por tierra como por aire y mar, con lo cual los turistas nacionales e internacionales pueden viajar de forma cómoda y rápida a cualquiera de las provincias. Los cinco aeropuertos que se reparten por su geografía, además de las líneas de alta velocidad y los siete puertos en los que atracan algunos de los mejores cruceros lo garantizan.
Sin embargo, no solo se trata de la movilidad, sino también de la inclusividaden las experiencias que se ofrecen en el territorio. La igualdad en el uso y disfrute de la oferta turística son indispensables, con lo cual la eliminación de barreras arquitectónicas o el conocimiento de las necesidades específicas de cada persona ayudan a dar un espacio a todos en las actividades en aspectos como la gastronomía, el turismo activo o la cultura.