
Londres está de aniversario. La Reina Isabel II, monarca de Inglaterra de 95 años de edad, cumple 70 años en el trono. Exactamente, el 6 de febrero de 1952, fecha en la que fue proclamada monarca tras la muerte de su padre Jorge VI. De este modo, una joven Elizabeth se convirtió en Reina de Inglaterra con apenas 25 años, un hito que se consolidó una año después, con la ceremonia de coronación celebrada en la abadía de Westminster. El impasse de tiempo entre ambos acontecimientos no se explica por los preparativos exigidos por el protocolo, sino por el luto guardado a su progenitor.
El lugar de entronización de los monarcas británicos no es otra que la abadía de Westminster, un templo consagrado en el siglo XI. Esta iglesia gótica del tamaño catedralicio se ubica cerca del palacio de homónimo y su importancia va más allá de su vínculo Real, ya que sus naves rebosan historia y albergan las tumbas de grandes personajes como Rudyard Kipling y Charles Dickens.