La Montaña de la Mesa (Table Mountain) se yergue majestuosa sobre Ciudad del Cabo y regala vistas espléndidas de esta gran urbe sudafricana situada a orillas del Atlántico Sur. Es- ta montaña aislada, de 1087 m, se alza como un telón vertical pero arriba muestra una superfi- cie plana de arenisca cuarcítica que ha resistido a la erosión. Se puede ascender hasta la cumbre por caminos muy espectaculares o incluso es-calando, y también mediante el teleférico Table Mountain, inaugurado en 1929. La Montaña de la Mesa da nombre al vasto parque nacional que recorre el espinazo de la Península del Cabo. En esta zona, no lejos de la confluencia de los oceános Atlántico e Índico, es frecuente que los vientos marinos generen un fino manto de nubes («el mantel de la mesa») cuando ascienden y se enfrían al toparse con la montaña